
Texto: Belén Pardo Cifuentes. Los Reyes de España han recorrido los municipios españoles devastados por los incendios y las inundaciones para mostrar su solidaridad a los afectados y conocer in situ los daños, pérdidas y desgracias ocasionadas.
Para ello se han desplazado a Tejeda y Valleseco afectadas por los recientes incendios en la isla de Gran Canaria; al municipio madrileño de Arganda del Rey, muy perjudicado por las inundaciones, y después lo han hecho a las localidades de Orihuela en Alicante y Los Alcázares, en Murcia, para conocer el alcance de las recientes inundaciones sufridas por el episodio de gota fría (DANA) y estar cerca de los damnificados.
En Gran Canaria, Don Felipe y Doña Letizia se dirigieron hacia la Cumbre de la isla sobrevolando en helicóptero las zonas más afectadas por los incendios.
Después desde el mirador de Degollada de las Palomas, limítrofe entre el municipio de Tejeda y el municipio de Valleseco visualizaron el área afectada por el fuego y recibieron explicaciones de los alcaldes de estas localidades más castigadas por los incendios. Los Reyes atravesaron zonas de carretera y pinar canario arrasados en agosto.
Unos días después, en Arganda, don Felipe y doña Letizia, recorrieron las calles devastadas y observaron los daños producidos y los trabajos de recuperación por parte de los vecinos y propietarios de los locales comerciales, como consecuencia de las inundaciones provocadas por la gota fría.
También se interesaron por los motivos que provocaron las inundaciones y las actuaciones y obras de infraestructura que se llevarán a cabo para evitar que vuelvan a suceder en el futuro.
Recientemente los Reyes se han desplazado a Orihuela y Molíns, en Alicante, para conocer el impacto y devastaciones causados por la DANA y trasladar su solidaridad a los afectados. En la Vega Baja, 2000 viviendas han sido asoladas, igual que cientos de empresas e instalaciones industriales, edificios públicos e instalaciones deportivas, cuantificándose las pérdidas en unos 1200 millones de euros. Especialmente emotivo fue, el encuentro con los vecinos de la pedanía de Molins donde 350 familias han sufrido daños importantes en sus viviendas y en las 83 hectáreas de cultivos que producen las cosechas de las que viven.

Desde allí se trasladaron al municipio costero de Los Alcázares, que también ha padecido las inundaciones y fuertes pérdidas materiales y de infraestructuras.
El desbordamiento de las ramblas y la gran cantidad de agua acumulada ocasionaron una difícil situación para los vecinos y ha perjudicado enormemente al mar Menor por los arrastres vertidos.
Desde su llegada hasta su despedida, en la Playa de la Encarnación, donde comprobaron el estado del Mar Menor e impacto medioambiental de las lluvias, los monarcas saludaron a todos los vecinos que aguardaban el paso de esta visita real, con cercanía y afecto.


Previamente a la llegada a Los Alcázares, y también mostrando su apoyo en situaciones de desgracias, estuvieron en la Academia General del Aire para expresar sus condolencias a los familiares de los comandantes Francisco Marín y Daniel Melero, fallecidos recientemente en sendos accidentes aéreos.
En todas las localidades los Reyes han mantenido reuniones de trabajo en los Ayuntamientos, donde don Felipe y doña Letizia, conocieron los detalles y alcance de las destrucciones así como el despliegue realizado para contrarrestar el azote de las lluvias e inundaciones.

El Rey destacó la unidad y el inestimable trabajo de todos los efectivos que socorrieron y participaron en las labores de ayuda y limpieza, y les agradeció su trabajo al tiempo que mostró su apoyo y solidaridad con los vecinos que han perdido todo lo que tenían.

Para esta visita acompañaron a los Reyes toda la cúpula de la Casa del Rey, encabezada por el Jefe de la Casa, Jaime Alfonsín; el Jefe de Protocolo, Alfredo Martínez y el Director de Comunicación, Jordi Gutiérrez.

Don Felipe y doña Letizia demostraron una vez más su preocupación por los que más lo necesitan, quienes así pudieron comprobar, emocionados, que no están solos.


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